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EL RINCÓN DE MIS PENSAMIENTOS

SE BAJA EL TELÓN CUANDO TE DAS CUENTA

SE BAJA EL TELÓN CUANDO TE DAS CUENTA

 

Siempre ocurría igual, ella hacia lo imposible por no fracasar, por tener a todos contentos, por no dejar que callera una lagrima resbalando por su mejilla. Y en contraposición, todo acababa terminando de la misma forma, es decir, el cielo se llenaba de oscuridad, las lágrimas acudían a sus ojos con asiduidad, y al final, cada cosa que tocaba acababa por desaparecer.

 

No, efectivamente no podemos decir que fuera una chica con suerte, ni una chica positiva, ni una de tantas que salen en películas y series que siempre acaban con una sonrisa en la boca mientras aparece el titulillo que marca el final.

 

Se esforzaba, hacia lo imposible, llenaba su cara con potingues para parecer que tenia buena cara, lloraba mucho por las noches para que por el día no tuviera ni una lagrima que derramar, se pintaba las uñas de colores alegres, y se vestía siempre de color verde porque su abuela, cuando era pequeña, siempre la relataba que aquel era el color de la esperanza. Y ella, esperaba, anhelaba cambiar, y en cierto modo intentaba ser como una de tantas chicas normales que viven su vida feliz, que sonríen por la calle, que corren de un lado para otro quedando con gente.

 

De esta forma, paso su vida siendo un espejismo, algo que no era, algo que luchaba entre varias personalidades, un reflejo de lo que los demás querían que fuera. A veces miraba su reflejo en los escaparates y tan solo veía un maniquí, compuesto por millones de actrices a las que admiraba, cantantes, amigas, novios, familia, pero en realidad, ella, poco a poco iba desapareciendo.

 

Poco a poco, se fue dando cuenta, de que ella era diferente, no hacía falta ser como las demás, no hacía falta contentar a todos, no hacía falta adoptar la forma, porque ella ya era su fondo. En cambio, esto lo descubrió tarde, porque normalmente cuando ya somos mayores y ya no nos importa lo que piensen los demás, es cuando acabamos descubriendo lo que somos y cuando ya se ha pasado mucho tiempo actuando. Y aunque la función debe continuar, esta normalmente echa el telón.

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