Blogia
EL RINCÓN DE MIS PENSAMIENTOS

JUNTOS...ALGUN DÍA

Creo que eras tu al que espere tanto tiempo en aquella calle, lo que pasa que no te reconocí, tu ibas con un sombrero negro y un bonito traje que te hacia parecer todo un caballero.  Y yo, simplemente esperaba a alguien un poco más alto que yo, y con una bonita sonrisa.

Así, los dos pasamos inadvertidos, tu seguiste tu camino, y yo di media vuelta y retrocedí sobre mis pasos. Creo que tiempo después llegaste a decir que tu corazón pertenecía a una muchacha que esperaba en un portal resguardándose del frío, pero que no te atreviste a decirla que eras tu al que aguardaba.

Ahora, han pasado treinta años y ya todo parece simplemente una anécdota que puedo contar a mis nietos. Les digo que un día en un invierno demasiado frío llego a mis manos una carta de un importante general que había vencido en varias guerras, su arrojo era reconocido en cada pueblo, en cada rincón del mundo y su generosidad, su buena fe, su amabilidad y su valentía no tenían cabida entre dos bandos que luchaban sólo por un territorio.

Aquella figura, aquel héroe, había vivido siempre conmigo, habíamos compartido bocadillos en aquella época en la que el dinero no era algo que sobrara, y habíamos jugado horas y horas tirando piedras a un riachuelo que pasaba cerca de nuestras casas.

Éramos dos, siempre el uno con el otro, hasta que tu te fuiste, me dejaste aquí, pendiente de toda noticia que hablase de tu. Te odie, me pareciste egoísta, desconsiderado. Aunque ahora comprendo que cada uno debe formar su vida y proyectarla hacia sus expectativas.

En este momento, estoy en mi casa, leyendo tus palabras de despedida. No te veré más, ni en la televisión, ni en el periódico cada mañana,…, ya no escucharé más historias sobre ti, y solo me quedara esperar la muerte para reunirme contigo, aunque seré valiente, la miraré de frente y dejaré que me guíe hacia ti. No quiero que vuelva a pasar, el mirar para otro lado y decir que nunca te reconocí, porque en esta vida no te he llegado a besar, ni a acariciar pero creo que hay que dejar paso a los “continuará”.

0 comentarios