NO OLVIDES AQUEL TIEMPO QUE COMPARTIMOS
Poco a poco nos fuimos distanciando, creo que todo ocurrió cuando decidiste ir a vivir unas calles más abajo del lugar donde solíamos quedar. Parecía poca la distancia, y en cambio se fue convirtiendo progresivamente en aquella que nos separaría. Ya no quedábamos para esas pequeñas cosas, como ir a comprar el pan, para acercarnos a esa pequeña tienda de la calle de en frente,…, y tal vez fuera una tontería, porque eran tan sólo unos metros o quizás unos pocos más, porque entre medias, se interpusieron la pereza de coger el teléfono, la apatía por salir de casa y el tiempo, porque…que duro se hace salir a la calle en invierno.
Y así fuimos estableciendo barreras, calendarios de clases y de trabajos, días que venían mal y otros que aunque se pudiera ninguna se decidía a realizar una llamada. Además íbamos llamando a otras personas que estaban allí, otras personas que habían ido rellenando los huecos que un día dejamos que completarán.
Hoy nos hemos vuelto a ver. Parecía como si te hubiera visto ayer, pero a la vez, a la hora de hablar contigo me di cuenta de que había perdido muchos capítulos de tu vida. Yo intente hacerte un resumen breve de todo aquello que me había pasado, y es curioso, porque en tan solo cinco minutos le puse punto y final a mi relato. Aunque sabia que dejaba atrás historias, pero por ser tontas o poco significantes no te las conté. No es que no quisiera, pero me parecía mal gastar el tiempo que compartía contigo, ese tiempo escaso que nos dedicábamos. Me apetecía formar nuevas historias a tu lado, tener anécdotas nuevas que contar, pero no me di cuenta que ese tiempo parecía que había pasado. Teníamos dificultad para disfrutar de la compañía de la otra, pues la confianza, esa de llamar a cualquier hora parecía que se había agotado, y esta era solo una tarde que le dedicas a una vieja amiga, para decir que todavía seguías manteniendo el contacto, aunque este se redujera a una pequeña recensión sobre el último año de tu vida.
Ya ves, en estos momentos puedo decir que te echo de menos, que me niego a creer que con la edad esto es lo que va a ocurriendo, que es el transcurso normal de la vida, porque no te quiero perder, aunque tampoco se como recuperarte.
2 comentarios
vphileas -
Es verdad que con el paso de los años se pierde el contacto con muchas amistades, con personas con las que hemos compartido muchas cosas y que durante un tiempo han sido imprescindibles en nuestra vida. También acabamos conociendo nuevas personas y haciendo nuevos amigos.
Si esa persona es realmente importante para ti, si te preocupa perder el contacto con ella, llámala antes de que os distancieis demasiado, y sin reservas, muéstrale tu preocupación. Intentad tener algo en común, alguna actividad que os permita encontraros periódicamente.
Ánimo.
Microalgo -
De cualquier manera, no cuente los perdidos, sino los encontrados. Verá que salen muchos.